Los castros de Narón

Narón es muy rico en este tipo de vestigios del pasado.
- Castro de Quintá, en el lugar de Quintá, en la parroquia de Santa María la Mayor del Val.
- Castro de la Cruz do Castro, en la parroquia de San Mateo de Trasancos.
- Castro de Sequeiro, en la parroquia de San Julián.
- Castro de A Revolta, en la parroquia de San Esteban de Sedes.
- Castro de Os Vicás, en la parroquia de San Julián.
- Castro da Ermida, en la parroquia de San Salvador de Pedroso.
- Castro de Santa María do Castro, en la parroquia del mismo nombre.
- Castro de Vilasuso, en Santa María a Maior de O Val.
Todos estos castros son de propiedad privada y no visitables.
Sí permiten la visita al de Eiravedra, el castro por excelencia de Narón. Domina el paisaje y el territorio, desde el valle de Pedroso a la ría de Xuvia y hasta las tierras de San Sadurniño. Su forma es ovalada, con una muralla en el interior y un terraplén hacia el exterior.
Y el Castro de Petouzal, en el Couto, que responde a la tipología de asentamiento costero que utilizaba la ría como fuente de recursos alimentarios merced a la pesca, etc. De él sólo se conservan los muros, de diez metros de altura, y los hoyos, con una profundidad de cinco metros. Situados los dos en su cara sudoeste, mirando al valle de Trasancos.